De València a cruzar el charco y desafiar al Brexit. La compañía valenciana de soluciones inteligentes WiTraC se lanza a la conquista de nuevos mercados después de ‘seducir’ a empresas de la talla de Mercadona, Pocelanosa, Ford o Volkswagen. El reto es doblemente ambicioso: por un lado, abrirá oficinas en País Vasco, Madrid y Barcelona y, a la vez, dará el salto a escala internacional en plazas como EEUU, México e Inglaterra antes de finalizar 2019. Una expansión motivada por el crecimiento de un negocio que ofrece soluciones de localización y monitorización modular e inalámbrica para las empresas.
Detrás de esta firma valenciana están Pep Pons y Javier Ferrer, dos ingenieros industriales de la Universitat Politècnica de València (UPV) quienes detectaron unas carencias en cuanto al control y visibilidad del stock y recursos en la industria. «Yo estuve en una gran consultora en estrategia y operaciones y me di cuenta de que el mundo estaba necesitado de visibilidad y control. Cuando estás ciego no ves qué sucede a tu alrededor y la industria malgastaba mucho dinero, recursos y tiempo en hacer cosas de forma manual, sin datos», afirma Ferrer, CEO de la compañía. Así fue como diseñaron una solución de medición y monitorización en tiempo real sobre cualquier material en una empresa para tener un conocimiento real sobre lo que sucede en las cadenas de suministro y conocer, a su vez, su estado.
«Creamos un hardware con datos de localización y de sensórica que fuese eficiente, es decir, inalámbrico y a tiempo real para ayudar a la industria. Y sin saberlo desarrollamos un software de inteligencia artificial. Combinando ambos conseguimos una solución integral de track and trace para resolver los problemas de visibilidad, trazabilidad y control para hacer más eficientes los flujos logísticos», explica el CEO de la compañía que recientemente ha recibido el premio a Pyme Innovadora que otorga el clúster de la automoción AVIA.
Estos sensores permiten localizar y medir cualquier producto para detectar lo que consume, si se mueve o no o su estado: si está frio o caliente. «Tienes un diagnóstico a tiempo real de lo que sucede y, a partir de ahí, el doctor tecnológico que es el cerebro WiTraC propone recetas o soluciones para mejorar y ser más eficiente», explica. Y es que el propósito de esta tecnología es lograr «una industria más segura y eficiente y que esté más conectada para conseguir que el usuario tenga un producto mejor», resalta.
Su primer gran hito fue conseguir como primer cliente a Ford España. «Tenían un problema de track and trace que nadie se lo había resuelto y llegaron dos chavales y lo conseguimos. Fue una empresa americana pero situada en Valencia la primera que confió en la innovación antes que otras», rememora. Ahora cuentan con unos 50 clientes entre los que se encuentran grandes enseñas, principalmente de sectores relacionados con la logística, alimentación y automoción que son «los primeros en haberse subido a este tsunami de la industria 4.0 porque necesitan estar en la cresta de la ola».
Tras conseguir cautivar al gigante del óvalo, la compañía entró en Lanzadera donde se dotaron del conocimiento y las herramientas necesarias para estabilizar su modelo de negocio. A lo largo de estos años también han recibido el apoyo de programas como StartUPV, Climate KIC o Impact Growth.
Pero esta tecnología de localización y medición no solo ha aportado a las empresas una mejor gestión de sus recursos, sino importantes ahorros económicos. «A un cliente le ahorramos unos 20 millones de euros en seis meses porque tenía mucho stock y gracias a WiTrac bajó sus volúmenes consiguiendo ese ahorro. A otro le ahorramos un millón el primer mes detectando dónde desaparecían sus palets», detalla. Y es que las soluciones de esta tecnología son tan diversas que también han permitido medir, por ejemplo, las partículas en suspensión, la humedad y la temperatura de los autobuses de la EMT de València.
Planes de expansión: a la conquista del mercado
Ahora su nuevo horizonte es ampliar su red de oficinas para dar cobertura a sus clientes de más de 15 países, y la búsqueda de nuevos talentos para duplicar en 12 meses su actual plantilla formada por 50 personas. Esta expansión pasa por abrir oficinas en Inglaterra, la costa este de EEUU y en México antes de acabar 2019. No hay miedo al Brexit. «Las empresas allí también necesitan de nuestras soluciones», recalca. Por el momento, ya cuentan con los responsables de las delegaciones mexicana y británica y están buscando el perfil más adecuado para encabezar las oficinas en América. En seis meses esperan contar con una plantilla de mínimo cinco personas en cada una de las oficinas. «El peso anglosajón va a tener más presencia pero siempre ideado desde València», subraya.
En España, ultiman su aterrizaje en el País Vasco, Barcelona y Madrid y para 2020 planean llegar a Francia y Alemania. «No es una plan tan ambicioso, sino realista. Nuestros clientes están en el extranjero y tenemos que satisfacer esa demanda. WiTraC estará cerca de su cliente y nuestro cliente está en todo el mundo», explica Ferrer. En 2018, facturaron 1,5 millones y prevén cerrar este ejercicio en torno a los cinco millones. «Queremos ser referentes de track and trace en la industria 4.0 en tres años», subraya Ferrer. Y precisamente hace hincapié en la importancia que tiene que las empresas se suban al tren de la digitalización para ser más avanzadas y competitivas.
València, en el radar mundial de la innovación tecnológica
«Todos los agentes del ecosistema tenemos que conseguir que se quite la burocracia y la idea que tiene el pequeño empresario que piensa que la tecnología es para los grandes», asegura. Esta adaptación es, a su juicio, una falta de cultura que debe incorporarse pronto porque aquellas que le den la espalda a esta «cuarta revolución industrial» estarán abocadas a desaparecer. «No hace falta gastarte miles de euros para sensorizar una compañía. La empresa valenciana debe escuchar porque la industria 4.0 ha conseguido que algunas empresas que no eran nada ahora sean las de mayor valor bursátil en todo el mundo», resalta.
De cara al futuro más a largo plazo, Javier Ferrer lo tiene claro: conseguir que WiTraC sea referente nacional dentro de la industria 4.0 y seguir abriendo nuevas delegaciones y unidades de negocio. «Queremos posicionar no solo a WiTraC sino a Valencia en el radar mundial de la innovación tecnológica en determinados sectores estratégicos», concluye.